– Salmos 128:1-3
"Bienaventurado todo aquel que teme a Jehová
que anda en sus caminos.
Cuando comieres el trabajo de tus manos,
bienaventurado serás, y te irá bien.
Tu mujer será como vid que lleva fruto
a los lados de tu casa; tus hijos como plantas
de olivo alrededor de tu mesa.”
